Gracias a la gentileza de Philips, pudimos probar uno de sus productos audiovisuales tope de línea. Estamos hablando del televisor LED Smart 3D de 55 pulgadas de la línea 8008 (55PFL8008G/77).
Televisor es una categoría que le queda chica a este centro multimedia, ya que además de brindar esta funcionalidad es una pantalla inteligente con cámara integrada, conexión Wi-Fi y un procesador Dual Core.
Siendo este el review de un dispositivo cuya imagen es el centro de su atractivo, tenemos que decir que sus 55 pulgadas o 140 centimetros de diámetro son impresionantes, es tener un cine en casa.
El tamaño a primera vista intimida un poco al usuario ya que ocupa aproximadamente 1,25 cm de largo por 80 cm de alto, por lo que varias mesitas se le quedan chicas a este Philips. Hay que agregar que el diseño está bastante cuidado, a la pantalla la recubre un fino marco negro, y una base de metal solida pero a la vez estética, que ocupa muy poco espacio en comparación con el tamaño del televisor.

Entrando en las características que acompañan esta pantalla inteligente comenzamos analizando un tema que no habíamos podido probar y nos dejó asombrados. Se trata de la tecnología de Philips denominada Ambilight.
Si bien el nombre no es muy explicativo, se trata de varios focos que están posicionados en los 3 lados superiores del televisor y que lo que hacen es proyectar el color que aparece en la pantalla sobre la superficie que dispositivo tenga detrás. Hay que agregar que se trata de una tecnología única ya que al ser fabricante de focos y luces, la empresa puede unir sus tecnologías para beneficio del usuario.

Si bien a simple vista varios podrían considerar este aspecto como secundario en la decisión de compra, es un apartado que hace una gran diferencia con otros aparatos en el mercado. Sin luz ambiente o con la luz apagada, la expansión de la imagen que logra el coro de luces Ambilight es brutal.
El ojo se centra en la imagen que está dentro del marco del televisor, y el resto de la visión panorámica no distingue su fin ya que sobre la pared continúan proyectándose los colores de la imagen. La instantaneidad y la coordinación con los colores que se proyectan es pantalla es alucinante, en escenas de ambientes, horizontes, o incluso en escenas de acción donde la cámara se mueve rápidamente las luces del Ambilight transmiten cada una de las graduaciones de color que se proyecta en cada punto de la pantalla.

Otro punto interesante es el efecto 3D. El televisor viene con 4 anteojos 3D pasivos, y con solo un comando del control remoto se puede activar el efecto en cualquier momento, sea durante una película, una serie, un videojuego.
Si bien se trata de un agregado a la imagen, el efecto 3D no fue aclamada dentro de la tecnología hogareña ya que no es lo suficientemente inmersiva, solo en algunos videojuegos o películas especialmente diseñados se puede notar la tridimensionalidad o la diferencia de distancias en los objetos, pero en la conversión de películas normales no es algo que valga la pena destacar.
El Philips 8008 es una línea que trae un procesador Dual-Core integrado que le permite utilizar un sistema operativo con diferentes aplicaciones de entretenimiento y comunicación, sean redes sociales, series, videoconferencias, películas o música. Al presionar el botón Smart el televisor entra en la pantalla de Philips Smart TV y el usuario puede seleccionar las aplicaciones que desee ejecutar, como Netflix, Facebook, Twitter, Youtube, etc. o descargar otras desde el store.
Cabe resaltar que en Argentina los televisores vienen con aplicaciones preinstaladas como Canal 13, Telefé, Mundo Gaturro, entre otras. La funcionalidad Smart ya es un estándar dentro de las distintas líneas de televisores, sin embargo en este caso, si bien es bastante completa con un gran catálogo para elegir, todavía es muy lento a la hora del manejo.
Entrar en el menú Smart puede tomarnos de 1 a 10 segundos hasta que se muestran todas las aplicaciones, una vez que el sistema nos permite seleccionar el contenido, tiene un delay de medio segundo entre presionar la tecla y el movimiento del cursor hacia el lado elegido.

Nuevamente al entrar a cualquier aplicación tenemos un delay importante, tanto al ingresar como al cargar el primer contenido. Otros problemas que se perciben son que, luego de bastante tiempo de carga, el sistema anuncia que no se pudo encontrar el contenido o que la conexión ha fallado, errores que terminan de frustrar al usuario.
Otro problema que encontramos fue a la hora de reproducir contenido desde un disco rígido o pendrive debido a la incompatibilidad de formatos o códecs. El televisor acepta formatos AVI, MKV, MP4, entre otros, sin embargo a la hora de visualizarlos, en ciertas ocasiones detecta errores y no reproduce el audio y sí la imagen o viceversa, por lo que hay que tener cuidado a la hora de reproducir contenido, que sea compatible con el dispositivo.

Una funcionalidad que nos llamó la atención fue la posibilidad de grabar la programación del cable a dispositivos USB como pendrives o discos rígidos.
Solamente configurando el dispositivo de grabación y chequeando el espacio disponible, al apretar un botón en el momento de estar viendo televisión, automáticamente comienza a grabar las imágenes en nuestro soporte físico. Característica muy útil para todos aquellos fanáticos que graban sus series favoritas.
Para todos los amantes de los videojuegos el modelo 8008 de Philips viene con la tecnología Dual Gaming. Puntualmente gracias a unos anteojos especiales, es posible jugar títulos de dos jugadores a pantalla dividida en toda la pantalla, sin observar la mitad del compañero.
Bastante útil a la hora de jugar juegos de acción o disparos en los que se delata la posición del enemigo de forma obvia. Sin embargo hay que tener en cuenta que se trata de una tecnología bastante joven, y por lo tanto todavía tiene sus fallas. Es muy común detectar que en los objetos en movimiento y menus hay una sombra o imagen fantasma detrás, con la imagen de la pantalla segundo jugador.
Este punto se hace molesto en juegos de carrera, ya que no permite ver correctamente el vehículo, generando que el título no pueda disfrutarse correctamente. Otra desventaja a destacar en este modo de video es que al estirar la mitad de la pantalla, sea vertical u horizontal, hasta cubrir las 55’’ del dispositivo, la imagen se estira de tal forma que queda desproporcionada comparada con la versión de un jugador, y eso empeora la vista general de juego.

Finalmente un punto y aparte se merece el diseño del control remoto. Curvo en sus detalles y con una comoda textura al tacto, tiene todas las funcionalidades clásicas de un control, pero además incorpora atajos para activar o desactivar el modo 3D, el Ambilight, las características Smart o incluso acceder al close caption, si está disponible.
Hay que agradecer a los ingenieros de Philips la incorporación de un teclado QWERTY en el lado inferior del dispositivo, que agiliza la inserción de texto en las aplicaciones, ya que se vuelve frustrante tener que escribir con las flechas clásicas.
Conclusión:
Sin duda el Philips 8008 de 55’’ es una gran apuesta dentro del mercado del entretenimiento hogareño. Resume en un solo dispositivo multiplicidad de funciones como reproductor de audio y video en full HD y 3D, además de las sociales como Facebook y Twitter, y termina de convencer con la cámara integrada. Sin embargo todavía es demasiado lento a la hora de realizar cualquier función, sea prender, apagar, o cambiar de canal. Para ser justos, es probable que muchos de los delays, errores e incompatibilidades se vayan limando con las actualizaciones de firmware que trae el dispositivo, es cuestión de esperar. Y que mejor forma de hacerlo que disfrutando de una gran película en full HD, en 3 dimensiones, y con ambilight.
La gente de Philips se contactó con nosotros para que podamos explicar más en profundidad porqué existen tiempos de carga tanto en el encendido como en los distintos comandos del control remoto:
Un televisor Smart tiene ciertas funciones básicas pero además hay que sumarle varios procesos en background, como el reconocimiento de la conexión de internet, o conectarse con el portal de Philips Smart TV. Cuando apretas el botón Smart TV lo que hace es conectar a un portal web que es lo que se muestra en pantalla, con las particularidades de una web diseñada para una televisión, pero básicamente es una página web. Al iniciar la televisión por primera vez, se inicia en background como una computadora. Si se prende y rápidamente se presiona el botón Smart TV, es muy probable que esta pantalla no vaya a aparecer, ya que hay varios procesos que están ejecutándose. Para los ansiosos nos cuesta mucho al principio, luego uno se acostumbra. En cuanto al control remoto de este televisor no es infrarrojo como los tradicionales, sino que maneja una tecnología de radiofrecuencia. En el infrarrojo se tienen que conectar de punto a punto, es decir apuntar el control al receptor. Este tipo de control trabaja con radiofrecuencia, una conexión inalámbrica que no necesita apuntar al televisor, si uno quiere, puede cambiar de canal desde cualquier habitación. Esto genera que cuando la televisión se prenda tenga que hacer un emparejamiento, y tenga un pequeño delay, pero la respuesta es buena en términos generales. El retraso es porque hay una señal en el aire y el televisor la está captando y desencriptando, Edgardo Folla, Marketing Manager de Philips TV