El regreso de Marcus Fenix y el Escuadrón Delta no podía darse de mejor manera. The Coalition y Xbox lanzaron este 26 de agosto Gears of War: Reloaded, una remasterización del primer título de la saga que, a pesar de sus casi 20 años de historia, se siente fresco y brutal en la actual generación.
Probamos la versión de Xbox Series X y el resultado es contundente: gráficos renovados, rendimiento sólido y una jugabilidad que se mantiene tan adictiva como siempre.
Una historia clásica, con piel nueva
La narrativa no presenta cambios respecto al juego original: estamos en Sera, 14 años después de la invasión de los Locust, donde Marcus Fenix es liberado de prisión por su compañero Dom Santiago para unirse al Escuadrón Delta.
La humanidad está al borde de la extinción y la campaña nos sumerge en una épica lucha por la supervivencia, con acción, tensión y un ritmo impecable. Aunque la historia es conocida, sigue funcionando gracias al tono cinematográfico y al diseño de niveles que consolidaron a Gears of War como referente en 2006.
Una remasterización que sorprende
Si bien ya habíamos tenido Gears of War: Ultimate Edition en 2015, Reloaded da un salto importante:
- Resolución 4K y hasta 60 FPS en campaña, con multijugador a 120 FPS.
- Texturas y modelados renovados, reflejos mejorados, humo y fuego con gran realismo.
- HDR, Dolby Vision, Dolby Atmos y audio espacial 3D 7.1, que elevan la inmersión.
- Cero pantallas de carga en la campaña, algo que se agradece muchísimo en 2025.
En Series X la experiencia es fluida y contundente: el juego luce espectacular, con un nivel de detalle que le hace justicia al recuerdo que teníamos de aquel clásico, pero con todas las ventajas técnicas de la nueva generación.
Mecánicas pulidas y diversión asegurada
El núcleo jugable sigue intacto: coberturas, disparos precisos, ejecuciones brutales y un gameplay táctico que obliga a pensar cada movimiento. La sensación de correr, cubrirse y coordinar ataques con el escuadrón nunca se sintió tan responsiva. Además, la posibilidad de jugar en pantalla partida mantiene vivo ese espíritu cooperativo que tantos recuerdan con cariño.
Una banda sonora que eleva la experiencia
La música en Gears of War: Reloaded merece mención aparte. Los temas orquestales acompañan perfectamente cada situación: transmiten tensión en los enfrentamientos, generan atmósferas inquietantes en la exploración y suben la adrenalina en las batallas más caóticas. Sumada al audio espacial 3D, la banda sonora refuerza la inmersión y potencia la intensidad del combate.
Un multijugador rediseñado
La vertiente online es otro de los puntos fuertes. Reloaded incluye los 19 mapas multijugador remasterizados, ocho modos PvP clásicos (Team Deathmatch, King of the Hill, Execution, entre otros) y servidores dedicados que ahora corren a 60Hz, con más cobertura de regiones y mejor estabilidad. Todo el contenido —personajes, cosméticos y mapas— está incluido desde el inicio, sin microtransacciones ni tiendas in-game: todo se desbloquea mediante progresión.
Duración y contenidos extra
La campaña tiene una duración media de 13 horas, que puede extenderse a unas 18 horas y media para quienes busquen el 100%. Además, Reloaded trae el acto adicional lanzado como DLC, junto a todos los mapas y modos multijugador, lo que lo convierte en la edición más completa del primer Gears of War.
Cross-play y accesibilidad
Otra novedad es la integración total entre plataformas: progresión y juego cruzado entre Xbox, PC y, por primera vez, PlayStation 5, donde se aprovechan las funciones del DualSense con gatillos adaptativos y retroalimentación háptica. Esto expande enormemente la comunidad y garantiza partidas rápidas en línea.
Conclusión
Gears of War: Reloaded no reinventa la rueda ni busca sorprender con cambios radicales. Su objetivo es claro: traer de vuelta un clásico con la calidad visual, sonora y técnica que merece en 2025. Y lo cumple con creces. Es una carta de amor a los fans veteranos y la oportunidad perfecta para que una nueva generación descubra los orígenes de una de las sagas más queridas de Xbox.
En Xbox Series X la experiencia es impecable: acción fluida, gráficos espectaculares, una música que intensifica cada momento y un multijugador renovado que invita a perder horas de juego. Si alguna vez quisiste volver a Sera o aún no conocías esta historia, Reloaded es la mejor forma de hacerlo.
Nota: 9/10
