
Ninja Gaiden 4, la última entrega de la mítica saga de aventura y acción, regresa con un lanzamiento brutal, veloz y visualmente impactante, que combina la precisión de Team Ninja con el frenetismo de PlatinumGames. El juego ya está disponible en Xbox Series X|S, PS5 y PC — además de llegar día uno a Game Pass en PC y Xbox Series X/S.

Después de trece años de silencio, la legendaria franquicia Ninja Gaiden vuelve con una entrega que honra su pasado y empuja su acción a nuevas alturas. Ninja Gaiden 4 es una experiencia tan rápida como despiadada, una danza de acero, sangre y reflejos milimétricos que recupera la esencia de la saga y la adapta a una nueva generación de jugadores.
Probamos el juego en Xbox Series X, donde corre a 4K y 60 FPS estables, con un rendimiento impecable y una optimización excelente: gráficos nítidos, luces dinámicas, abundante sangre y escenarios repletos de detalle.
Un regreso sangriento y espectacular

El nuevo protagonista, Yakumo, hereda la voluntad del legendario Ryu Hayabusa, quien también es jugable durante la historia. Juntos enfrentan una amenaza que mezcla misticismo y tecnología: el regreso del Dragón Oscuro, que ha sumido a Tokio en una lluvia maldita y un ambiente cyberpunk apocalíptico.
La narrativa, más cinematográfica que en entregas anteriores, ofrece buenos giros y momentos épicos, aunque sigue siendo un título lineal, centrado casi por completo en el combate y la acción directa.
Durante nuestra partida de aproximadamente 12 horas en dificultad Normal, el juego ofreció un ritmo constante y adrenalínico. Si bien su duración puede extenderse con búsquedas secundarias o al aumentar la dificultad, la campaña principal es intensa, sin rellenos ni pausas innecesarias.
Jugabilidad pura y extrema

En cuanto al control, Ninja Gaiden 4 es una clase magistral de acción en tercera persona. Podemos atacar con la espada, combinar golpes con el gancho, realizar saltos frenéticos entre paredes, correr, deslizarnos y ejecutar derribos acrobáticos. Todo fluye con una suavidad impresionante, reforzando la sensación de estar realmente al mando de un ninja letal.
El combate premia la precisión, la velocidad y el timing. Los enemigos son agresivos, y las batallas pueden acabar en segundos si bajamos la guardia. En dificultad Normal, el juego ofrece un reto justo, con picos de exigencia en los jefes y una progresión que mantiene la tensión sin frustrar. Los jugadores expertos encontrarán un verdadero infierno en los modos Hard y Master Ninja, donde cada golpe cuenta.
Una fusión brillante entre Team Ninja y PlatinumGames

Esta entrega marca un nuevo punto de equilibrio entre el estilo técnico y desafiante de Team Ninja y la fluidez visual y jugable de PlatinumGames. Cada combate se siente coreografiado, con animaciones espectaculares y transiciones limpias entre combos, paradas y ejecuciones. Además, el sistema de “Bloodraven Form” de Yakumo, que manipula su propia sangre y la de los enemigos para crear ataques devastadores, aporta un giro fresco al clásico hack and slash.
Los movimientos icónicos como Izuna Drop o Flying Swallow regresan más brutales que nunca, y el arsenal crece a medida que avanzamos, combinando armas tradicionales con técnicas de ninjutsu de sangre que desatan auténticos festines visuales.
Diseño, ambientación e idioma

Los escenarios oscilan entre grandes áreas urbanas devastadas y zonas cerradas repletas de trampas y enemigos, con una dirección artística que combina modernidad y tradición japonesa. La iluminación es excelente, con reflejos y sombras que realzan la atmósfera sombría de Tokio bajo la lluvia maldita. En Xbox Series X, el juego luce soberbio, con un apartado técnico impecable.
Además, Ninja Gaiden 4 puede disfrutarse con audio en japonés o en inglés, con subtítulos completamente traducidos al español, lo que permite vivir la historia con autenticidad o preferencia según cada jugador.
Accesibilidad y desafío para todos

Ninja Gaiden 4 incorpora un sistema de dificultad flexible y funciones de asistencia que lo hacen más accesible para nuevos jugadores. Modos como Hero incluyen ayudas automáticas para esquivar o bloquear, mientras que los veteranos pueden personalizar completamente los controles y desactivar ayudas para revivir la experiencia clásica. Esta apertura es una gran decisión: el juego enseña y desafía al mismo tiempo, empujando al jugador a mejorar sin frustrar.
Veredicto final

Ninja Gaiden 4 es todo lo que un fan de la saga esperaba: una explosión de adrenalina, sangre y técnica, con un combate profundo, exigente y visualmente deslumbrante. No innova en estructura ni narrativa, pero refina la fórmula hasta rozar la perfección del género hack and slash.
Probado en Xbox Series X, el juego se siente sólido, fluido y feroz, con una optimización sobresaliente y una ejecución técnica impecable. Su linealidad puede no gustar a todos, pero cada minuto está diseñado para mantenerte al filo de la katana.
En definitiva, una experiencia brutal, intensa y completamente ninja.
Puntuación final: 9/10.